La importancia de un ping bajo en League of Legends

Los profesionales siempre lo marcan como factor diferencial

El ping, en todos los ámbitos del League of Legends, es unos de los factores básicos más determinantes del juego. Las reacciones rápidas y la toma de decisiones en momentos claves pueden ser absolutamente determinantes para el devenir de una partida, incluso para la carrera de un jugador.

Los profesionales de League of Legends son los que más lo notan, y normalment suelen estar acostumbrados a los pings más bajos para asegurar las condiciones más óptimas para jugar. Gracias a ello, tienen a su haber las mejores posibilidades para reaccionar a pequeñas ventanas y reacciones, aunque debido a los servidores y a las diferencias de latencia, muchas veces las partidas de solo queue no están del todo balanceadas.

Cómo funciona el ping en League of Legends

El ping ayuda a medir el tiempo que necesita la data para ser mandando al host local del destinatario, y que éste devuelva la información. En este caso, en League of Legends se trata del tiempo que tarda un determinado jugador en mandar información in-game en forma de paquetes de data a los servidores de Riot, para que ésta sea devuelta.

Y pese a que muchas veces los números de ping no oscilan entre cifras muy distantes, para los más profesionales son totalmente claves. Normalmente, en condiciones normales, el ping de una partida va de 40 a 70 de ping, aunque en algunos servidores puede llegar hasta los 10. Y para muestra, un botón.

En esta jugada tenemos a Nemesis, ex midlaner de Fnatic. Ahora en Corea del Sur, el esloveno se encuentra entrenando en una de las regiones con mayor nivel de solo queue, y también con una de las mejores latencias de ping del globo. Y aquí Nemesis le saca todo el partido posible: le permite tirarse a sí mismo la definitiva de Kayle para evitar ser asesinado por Akali, y girar la jugada.