Quiero ser como Doublelift

El mejor jugador norteamericano de League of Legends de toda la historia ha puesto un punto y final. Yiliang Peng «Doublelift» ha colgado el ratón y el teclado tras 10 años al pie del cañón, desde el origen de todo. Como él mismo escribió en su emotivo comunicado de despedida, pasó de ser un «niño sin esperanzas» a un adulto exitoso. Por ese mismo motivo, quiero ser como Doublelift.

Quiero ser como Doublelift porque se quitó la etiqueta de perdedor a base de esfuerzo. Aunque ahora se despide como el profesional más laureado de América del Norte, decir en 2013 que era mejor comunicador que jugador no era ninguna locura. Talento le sobraba, al fin y al cabo lo ha demostrado al largo del tiempo, pero no todos cuentan con una actitud trabajadora. Eso mismo provocó que, tras rozar el abismo en 2014 al casi descender a la extinta Challenger Series, hiciera de CLG un club ganador al siguiente año tras conseguir su primera League of Legends Championship Series (LCS).

Quiero ser como Doublelift por su capacidad innata para empezar de cero. El tirador ha sido un tipo que ha tenido claro su objetivo desde el principio: «ser descarado, confiado y popular». Para ello tomó la dirección de la victoria y cometió algunas acciones que requieren de un valor inimaginable. Marcha de CLG para poner rumbo a Team SoloMid, el eterno rival del club de George Georgallidis «Hotshot«, y tirar a la basura la camiseta de tu exequipo no está a la altura de todos. Por mucho que digan, hay que ser valiente ‘de cojones’ para hacer eso. Y luego, cuando a falta de éxito internacional parece que lo tiene ‘todo’ en TSM, decide reescribir su historia en Team Liquid.

El tirador ha sido un tipo que ha tenido claro su objetivo desde el principio: «ser descarado, confiado y popular». Para ello tomó la dirección de la victoria

Quiero ser como Doublelift porque ha sabido reponerse cuando la banda sonora de la desgracia asaltó su vida. Abril de 2018, el tirador recibe la trágica noticia de que su madre ha sido asesinada a manos de su hermano mayor y, su padre, herido de gravedad. Todo esto a tan solo una semana de las finales del Spring Split que disputaba contra 100 Thieves. En vez de achantarse dio un paso adelante y se hizo con ese campeonato de la LCS. Consiguió que la competición y el apoyo incondicional de sus seguidores inmunizaran una parte del dolor que supone una pérdida de tal calibre.

Quiero ser como Doublelift por su carácter. Como absolutamente todos, tirador no es ningún santo (levante la mano quien no haya pecado), pero siempre ha ido de frente. En las buenas era el primero en mirarte por encima del hombro a la mínima que podía para hacer trash talk, pero en las malas también ha dado la cara en la gran mayoría de ocasiones. Durante toda su carrera se ha desprendido de sus miedos personales a medida que hablaba más y en la mayor parte del tiempo lo ha hecho siendo realista o asumiendo las consecuencias de sus actos.

Quiero ser como Doublelift porque se retiró un 25 de noviembre, horas después de que el mundo se paralizara por la muerte de Diego Armando Maradona, y aun así no perdió ni un ápice de progatonismo. Puso punto y final el mismo día que personajes como el ilustrísimo George Best o el controvertido Fidel Castro se despidieron. La grandeza del norteamericano reside en que, como todas las figuras mencionadas, ha trascendido. Leo con impotencia ese «gracias por verme crecer» porque precisamente quienes tenemos que estar agradecidos somos nosotros, Peter. Por todos estos motivos y más, quiero ser como Doublelift.

Deja una respuesta